En 2020, Ariana Grande sorprendió con la compra de una lujosa mansión en Hollywood Hills, California, por $13.7 millones.
Pero la propiedad no duró mucho en sus manos. La cantante decidió venderla tan solo un año después porque tenía miedo de vivir en ella.
¿La razón? Ariana fue víctima de varios ataques en la mansión a causa de un hombre identificado como Aharon Brown.
El hombre no solo la acosó a las afueras de su propiedad durante 7 meses, sino que pretendía matarla con un cuchillo.
El lugar cuenta con una enorme pileta "infinitiva", un estilo que por estos días es tendencia en los hogares modernos.
La propiedad también cuenta con su propio sauna en casa, perfecto para que la cantante se relaje.
La cocina es minimalista y se basa en dos colores: el negro y el madera. También tiene una gran vista.